El barrio del Raval de Barcelona, rodeado de muros hasta 1859, está limitado por Las Ramblas, la calle Pelai, Ronda Sant Antoni y Sant Pere. Estas antiguas calles medievales, marcan el curso de las paredes que con el tiempo tuvo que saltar Barcelona, para ampliar la ciudad. El Raval, palabra del árabe, significa vecindario. Era una zona de tierras cultivadas entre los antiguos caminos romanos. Nace en el siglo XIV, cuando se construyen las murallas medievales que lo rodeaban y se crean numerosos conventos. A partir del siglo XVIII, las industrias empiezan a sustituir a los campos. La progresiva construcción de fábricas y casas para los trabajadores lo convierte en 1840, en el barrio obrero más denso de Europa.
El Raval se fue convirtiendo cada vez más en un barrio de viviendas para las clases con menos poder adquisitivo, entre las cuales los inmigrantes (exposiciones universales de 1888 y 1929) eran una parte destacada. Esta extracción proletaria jugó un papel importante durante la Semana Trágica (26-31 de julio de 1909), durante la cual el Raval fue uno de los principales escenarios de la quema de conventos y del enfrentamiento con el ejército.
La densidad de población, las calles estrechas y tortuosas, la proximidad del puerto y la cantidad de bares, salas de espectáculos y casas de tolerancia, acabaron configurando una zona en el sur del Raval que en 1925 el periodista Àngel Marsà bautizó con el nombre de "Barrio Chino". Las destrucciones de la guerra y la miseria de la posguerra afectaron a la vida nocturna del barrio, que recibió otro golpe con el decreto de cierre de las casas de prostitución en el año 1956.
A principios del siglo XX, el Raval continuaba siendo un barrio obrero y fue origen de los primeros movimientos obreros en Barcelona. La proximidad del puerto y la cantidad de bares y salas de fiestas dieron un carácter especial al barrio. De aquel "Barrio Chino" bohemio y promiscuo, queda poco.
Después de la reformas urbanísticas (apertura Avinguda Drassenes, apertura de la Rambla del Raval,..), el casco antiguo de los conventos y hospitales de Barcelona es hoy un mosaico multicultural en el que el choque entre la modernidad y el pasado se han convertido en un imán para la gente de todo el mundo. El Raval concentra una gran parte de las instituciones culturales de Barcelona. En sus calles se apiñan museos, teatros, galerias, restaurantes, bares de copas.
La Filmoteca Nacional de Catalunya ocupa una de las esquinas más míticas de la ciudad, calle Sant Pau esquina calle Espalter. En la misma calle, Sant Pau, 65, se encuentra el no menos mítico Bar Marsella, de los más antiguos de Barcelona y conocido por servir la absenta que Hemingway bebia aquí.
La creación de el Foment de les Arts Decoratives (FAD) en el convent dels Àngels, el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), el Museu D'Art Contemporani (MACBA), y la Facultat de Geografia i Història han dinamizado El Raval y propiciado la apertura de nuevos negocios.
En las míticas Ramblas, se encuentran el Gran Teatro del Liceu y el Mercado de la Boqueria. Dentro del mercado está el conocido Bar Pinotxo, una de las mejores barras de la ciudad, donde siempre hay cola para probar sus exquisitos platos.
Muy cerca de aquí está la Pastisseria Escribà, en la antigua Casa Figueras, un bellísimo local modernista reformado en 1902. Pertenece a la familia del pastelero Antonio Escribá, que era conocido como el "Mozart del chocolate". Siguiendo con el modernismo, se pueden visitar los bares Casa Almirall, London Bar, La Confiteria y Muy Buenas. Tampoco merece la pena visitar la espectacular restauración del Hotel España, un hotel y restaurante de cuatro estrellas superior. En la calle Nou de la Rambla, 3 puedes visitar el Palau Güell, del año 1890, uno de los primeros proyectos de Gaudí.
No hay que perderse el Antiguo Hospital de la Santa Creu, conjunto gótico civil catalán en todo su esplendor. Iniciado en 1401, estuvo activo hasta 1929. Hoy es sede del Institut de Estudis Catalans, La Real Academia de Medicina y la Biblioteca de Catalunya. Está declarado Monumento Histórico Artístico de Interés Nacional.
En la calle Sant Pau 101, se encuentra el conjunto románico de Sant Pau del Camp, anterior al siglo X. Fue un monasterio con una pequeña villa medieval y primer núcleo importante de El Raval.